Carolina Ángel empezó a tatuar en 2007. Trabaja en Barcelona Electric desde que se abrió el estudio en el 2009. Enfocada siempre en el tatuaje clásico, apuesta por una técnica refinada y un imaginario que va más allá del tattoo tradicional, focalizándose en muchas ocasiones en la fantasía y todo tipo de diseños que podrías ver en las tiendas de tattoo de los 70 y los 80, tales como dagas, dragones, guerreras, serpientes y unicornios. Sus premisas más importantes son colores brillantes o grises suaves y la durabilidad de los tatuajes en la piel, deben ser igualmente mágicos con el paso de los años.